Ir al contenido principal

Primer partido: Boston 86 - Cleveland 96


En efecto, los Celtics fueron derrotados ayer por los Cavs, con una diferencia de diez puntos, a pesar de que éstos nos contaban con la presencia de Lebron James. Por Boston, el jugador más destacado fue Paul Pierce, quien logró 18 puntos 7 rebotes y 3 asistencias en los 27 minutos que disputó, con unos correctos porcentajes de anotación. Le siguieron Mark Blount, con 12 puntos y 5 rebotes, y Justin Reed, con 10 puntos y 4 rebotes. El máximo reboteador fue Kedrick Perkins, con 9 rebotes en 19 minutos, quien estuvo mal en la faceta ofensiva al no anotar un sólo punto. Destacar también el hecho que Boston consiguió 11 rebotes más que los Cavs durante el encuentro. Los Cavs fueron en cambio más eficaces en el lanzamiento y dispusieron de más intentos, lo que explica su victoria.

Hay que señalar también que West jugó como titular, y tuvo, como Dickau, una actuación discreta, como la mayor parte de los que jugaron. Particularmente mal estuvo Ryan Gomes en ataque, quien sólo anotó un lanzamiento de los seis que intentó. Disputaron pocos minutos Borchardt, Green, Greene, mientras que Bynum no jugó.

Por Cleveland, sobresalieron Jackson (14 ptos), Marshall (13) e Illgauskas (12).

Más información: BOX SCORE

Lo mejor: las aportaciones de Blount y Reed.

Lo peor: sufrir ya la primera derrota de la temporada, aunque esta no diga mucho de lo que puede suceder en el futuro.

Próximo partido: Viernes 14, frente a Toronto.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ultimo post: despedida y cierre

Bienvenidos al último post del blog de Branhunter Sí, tras este texto, no volvere a introducir nuevas entradas en este blog dedicado a los Celtics. Ello no impedirá participaciones concretas en foros y otros blogs, pero éstas tendrán una carácter eventual y vinculado a acontecimientos y actuaciones concretas. El futuro en verde Pronto empezarán los training camps y tendremos ocasión de seguir las vicisitudes del equipo bostoniano una temporada más. La temporada que se abre para los Celtics será sin duda mejor que la pasada, aunque aparezca una vez más llena de incógnitas. Boston vuelve a la NBA con un equipo con más juventud, pero con bastante más experiencia y calidad que el año pasado. Algunas incorporaciones claves como Telfair o incluso Ratliff mejoran lo que había antes (Dickau, Lafrentz), mientras que el crecimiento de los jóvenes que entran en tercer y cuarto año o el año sophomore de Green y Gomes han de ser positivos. También los rookies tendrán algo que decir en la liga que s...

Algo más que una derrota

Ayer Boston y Minnesota se vieron las caras tras el traspaso de siete jugadores que supuso la llegada de Szczerbiak, Olowakandi y Jones al equipo céltico y el resultado fue una derrota apabullante: 85-110. Quizás esos 25 puntos de diferencia representen una buena medida del error en que ha incurrido Boston realizando este traspaso. A pesar de que no hay duda de que dos jugadores de los Wolves, Banks y Blount, jugaron hipermotivados, sus numeros fueron realmente brillantes: 20 pts y 6 a. y 16 pts y 10 reb. respectivamente. Unas cifras que parece difícil que mantengan en los próximos días, conocido el currículum de ambos, pero que señalan algo importante: que en ese traspaso había algo más que morralla. ¿Cómo debe analizar Boston la decisión de desprenderse de Blount and Co? ¿Cómo un error en la línea seguida en la reconstrucción de la franquicia o como un fracaso en la capacidad de definir una forma adecuada al tipo de jugadores de que se disponia? En la primera creencia viven instalado...

Desarrollar o traspasa: el debate céltico

El céltico se pone día sí, día también en la piel de Danny Ainge para meditar sobre el futuro de la franquicia y reflexiona sobre los movimientos que deberían hacerse y las decisiones que deberían tomarse. No es nada peculiar, sólo la herencia de aficionarse a un equipo por proximidad geográfica o porque fue de los primeros que se vieron en televisiones hispanas ganar algún título. El caso es que el seguidor tiende al desasosiego, veinte años sin ganar nada es mucho tiempo, a pesar de que el ejemplo de los Red Sox nos indica que varias generaciones pueden no ver ganar nunca a su equipo profesional estadounidense. Plantilla en mano, el aficionado descubre una composición peculiar, en la que los jugadores de primer, segundo y tercer año forman el grueso de la misma, acompañados por algún veterano irrecuperable, un lider virtual y un jugador ejemplar. Una plantilla que en ningún caso puede pensar que está a punto de ganar nada pero que sus responsables deben dirigir hacia el objetivo del...