El regreso de Antoine Walker a la disciplina celtica ha causado estupor, sorpresa, decepciones y alegrías. Yo estoy entre los decepcionados. Walker se integra hoy en un quinteto mejor construido que el que podría haber por en 2003, cuando se marchó, y con mejores refuerzos desde el banquillo, muy especialmente Davis y Jefferson. En 2003 nos disponiamos a empezar la temporada con Banks / James, Pierce, Walker, Vin Baker y Battie / Blount. Hoy seguimos con Banks, hemos cambiado a Allen por Baker, a Lafrentz por Battie y además contamos con un sexto hombre mas eficaz que Eric Williams (Davis), con un poder emergente bajo los palos llamado Jefferson, con un base prometedor como Delonte... Pero aquí de lo que se trata es de ganar un título y ni ese quinteto ni este son grandes contendientes en el Este.
Entrando en los aspectos negativos, descubrimos que Delonte será el base titular por el momento. Paradojicamente, le damos la titularidad a uno de los rookies con menos minutos disputados, mientras la llegada de Walker amenaza los minutos de Jefferson. Aun suponiendo que el traer a Walker arregle algo en las posiciones interiores, ¿no será excesiva la debilidad en la direccion de juego si Payton no regresa?Por otro lado, este trade puede ser muy negativo para Al Jefferson y Kedrick Perkins. Ambos tenían la oportunidad de ganar minutos ante el bajo rendimiento de Blount y convertirse en jugadores de más minutos y peso especßfico, pero ahora llega Fatoine a ocupar un buen numero de minutos y de responsabilidades. Una perla como Jefferson y una oportunidad como Perkins necesitan minutos para un desarrollo cierto, no ser tapados por jugadores, excepto si estos son verdaderamente dominantes (Webber!!!). Algo parecido le ha ocurrido a Sweetney con el ultimo traspaso de New York. ¿Cuantos minutos va a tener ahora que llegab Maurice Taylor y Malik Rose? Es obvio que hoy por hoy, a la espera de saber si regresa Payton, Banks y West están condenados a ganar minutos, pero aun reduciendo el papel de Blount recolocando a Lafrentz en el centro, Al o Kedrick verán reducida su participación en el juego. Si encima vuelve Payton, estariamos ante un equipo titular francamente veterano -quizas para goce de algunos- acaparando minutos, con Allen de cambio preferente para que juegue Davis y con el resto de jugadores disputando un numero reducido de minutos.
Este tipo de movimientos, además, no presentan en modo alguno garantías de mejora del rendimiento del equipo. No sólo porque presentan un coste en la debilitación de otra posición, sino también porque el resultado de la mezcla de jugadores "inseguros" (Walker,Lafrentz,Blount, pero no solamente) puede dar como resultado la mediocridad. No había sido fácil armar este equipo, nos había costado bastantes meses y ahora le hemos sometido a una desestabilización, que puede perjudicarnos gravemente.
Por último, destacar que se ha puesto de manifiesto que una determinada forma de entender la reconstrucción, transición o renovación ha entrado en crisis. Este movimiento, que nos cuesta una primera ronda de draft, no es propio de un equipo que se sitúa en transición y en el desarrollo de jóvenes jugadores, sino de un equipo que aspira a ganar competitividad de forma inmediata, y ello indica un cambio de orientación. Sus resultados los iremos viendo a lo largo de los próximos meses. Una nueva fase en la historia celta parece que comienza, y no exenta de sombras. Seguramente el pasado jueves será un punto de inflexion, una encrucijada más en la historia de la franquicia, de aquella que marcan un destino u otro. Esperemos que la llegada de Walker no sea el ingente error que parece ser, fácilmente describible en: pan para hoy, hambre para mañana.
Entrando en los aspectos negativos, descubrimos que Delonte será el base titular por el momento. Paradojicamente, le damos la titularidad a uno de los rookies con menos minutos disputados, mientras la llegada de Walker amenaza los minutos de Jefferson. Aun suponiendo que el traer a Walker arregle algo en las posiciones interiores, ¿no será excesiva la debilidad en la direccion de juego si Payton no regresa?Por otro lado, este trade puede ser muy negativo para Al Jefferson y Kedrick Perkins. Ambos tenían la oportunidad de ganar minutos ante el bajo rendimiento de Blount y convertirse en jugadores de más minutos y peso especßfico, pero ahora llega Fatoine a ocupar un buen numero de minutos y de responsabilidades. Una perla como Jefferson y una oportunidad como Perkins necesitan minutos para un desarrollo cierto, no ser tapados por jugadores, excepto si estos son verdaderamente dominantes (Webber!!!). Algo parecido le ha ocurrido a Sweetney con el ultimo traspaso de New York. ¿Cuantos minutos va a tener ahora que llegab Maurice Taylor y Malik Rose? Es obvio que hoy por hoy, a la espera de saber si regresa Payton, Banks y West están condenados a ganar minutos, pero aun reduciendo el papel de Blount recolocando a Lafrentz en el centro, Al o Kedrick verán reducida su participación en el juego. Si encima vuelve Payton, estariamos ante un equipo titular francamente veterano -quizas para goce de algunos- acaparando minutos, con Allen de cambio preferente para que juegue Davis y con el resto de jugadores disputando un numero reducido de minutos.
Este tipo de movimientos, además, no presentan en modo alguno garantías de mejora del rendimiento del equipo. No sólo porque presentan un coste en la debilitación de otra posición, sino también porque el resultado de la mezcla de jugadores "inseguros" (Walker,Lafrentz,Blount, pero no solamente) puede dar como resultado la mediocridad. No había sido fácil armar este equipo, nos había costado bastantes meses y ahora le hemos sometido a una desestabilización, que puede perjudicarnos gravemente.
Por último, destacar que se ha puesto de manifiesto que una determinada forma de entender la reconstrucción, transición o renovación ha entrado en crisis. Este movimiento, que nos cuesta una primera ronda de draft, no es propio de un equipo que se sitúa en transición y en el desarrollo de jóvenes jugadores, sino de un equipo que aspira a ganar competitividad de forma inmediata, y ello indica un cambio de orientación. Sus resultados los iremos viendo a lo largo de los próximos meses. Una nueva fase en la historia celta parece que comienza, y no exenta de sombras. Seguramente el pasado jueves será un punto de inflexion, una encrucijada más en la historia de la franquicia, de aquella que marcan un destino u otro. Esperemos que la llegada de Walker no sea el ingente error que parece ser, fácilmente describible en: pan para hoy, hambre para mañana.
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